Aprender a comer bien desde el colegio
Si aprendemos a comer desde pequeños, es probable que, de mayores, nos alimentemos de un modo sano y saludable. ¿Y dónde aprender a comer mejor que en la escuela? Y, además, no resulta nada difícil: aplicando algunos métodos y trucos los alumnos pueden aprender mucho sobre nutrición… tanto dentro como fuera del aula. Será el modo por la cual el niño aprenderá a incluir la nutrición en su cuidado personal, estilo de vida y comportamiento social. Aquí van algunas sugerencias para conseguirlo:
- Enseñanza integral
La educación de los alumnos, en materia de nutrición, debe ser impartida dentro de una parcela que incluya también la importancia del sueño y el manejo del estrés.
- La cocina como un laboratorio de enseñanza nutricional.
Se podría combinar el estudio de la anatomía con lecciones culinarias, de manera que los alumnos aprendan, a través de lecciones prácticas, el impacto real de los alimentos sobre nuestro cuerpo.
- Practicar lo que se enseña… y aprende
Sería bueno que los alumnos pudieran encontrar herramientas, en sus vidas reales, para aplicar fuera del aula lo que 
aprenden en el aula. Por ejemplo, incluyendo información nutricional comprensible en envases y envoltorios de alimentos… incluso en menús de restaurantes.
- Formar al alumno en la autorregulación
A menudo, la ansiedad es el mayor enemigo de una alimentación saludable. Quizás, por este motivo, fuera bueno que el alumno fuera instruido en técnicas de pensamiento y control de la interrelación mente/cuerpo.
- Predicar con el ejemplo
Médicos y equipos de atención primaria pueden hacer mucho en la difusión de dietas y estilos de vida saludables. Para comprobar las tasas de éxito de estas prácticas no hay más que ver, en otro campo, el éxito que tuvieron las campañas antitabaco entre los médicos… quienes acabaron instando a los pacientes a hacer lo mismo.